Por lo general, la piel de los bebés es delicada y sensible. Esto significa, que los bebés pueden ser propensos a irritaciones y alergias de la piel, por eso es importante prestar atención a ciertas señales. Descubre cómo identificarlas.
5 señales de que tu bebé tiene la piel sensible
La piel sensible es un problema común en los bebés y es importante saber cómo detectarlo para tomar las medidas necesarias a tiempo y proteger su piel. Esto es lo que puedes comprobar para confirmar si tiene la piel sensible:
- Enrojecimiento de la piel: si ves que cada poco tiempo la piel de tu bebé se muestra roja e irritada, puede ser una señal de que tiene la piel sensible. El enrojecimiento puede ser causado por diversos aspectos; desde el clima hasta la ropa o incluso a ciertos productos de cuidado de la piel.
- Sequedad o piel escamosa: si la piel del bebé se muestra con una apariencia seca y escamosa, puede ser una señal de que tiene la piel sensible. Se puede deber a una falta de humedad en el aire o al uso de jabones o lociones que le hacen daño.
- Picores: no es muy normal que el bebé se rasque continuamente como si estuviera incómodo, porque es señal de que algo no marcha bien. La picazón puede deberse a alergias a ciertos productos.
- Erupciones: similar al caso anterior, si ves que un bebé tiene erupciones cutáneas, pueden ser una señal de que tiene la piel sensible. Se puede producir por el uso de productos químicos o alergias alimentarias.
- Sensibilidad al tacto: si el bebé se muestra un tanto incómodo cuando una persona lo toca o incluso en el monero de vestirlo, puede ser que ciertas prendas no le resulten agradables o incluso le causen alergia.
Si estas situaciones te resultan familiares con tu bebé, prácticamente podrías confirmar que tiene la piel sensible y que hay algo que debe cambiar.
Para ello, lo primero que puedes hacer es elegir productos hipoalergénicos y que sean seguros para bebés. Los hay incluso etiquetados para bebés con piel sensible. También es recomendable evitar el uso de productos con fragancias y colorantes, porque son un pelín más agresivos y pueden irritar la piel del bebé.
Otro aspecto a considerar, es el uso del detergente al lavar la ropa. Utiliza siempre un detergente suave, porque de lo contrario podría tener un impacto sobre la piel del bebé.
Mantener siempre bien hidratada la piel es otro aspecto importantísimo, en todo tipo de bebés independientemente de su tipo de piel, pero más aún si tiene la piel sensible. Para ello, elige una loción suave y libre de fragancias.
Estos tips junto con una limpieza regular del hogar y una ventilación adecuada, te ayudará a reducir la exposición de su bebé a posibles alérgenos.
La piel sensible en los niños es habitual pero, como ves, hay muchas cosas que se pueden hacer para tratar de minimizar cualquier riesgo y que todo vaya estupendamente bien. Seguro que no tienes de qué preocuparte.
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