Hay algunos aromas que nos evocan emociones y transportan a otro lugar. Los olores de una comida que nos recuerda a la infancia, el olor de la ropa de una persona, el olor de una casa… y sin duda, existe un olor muy característico que a todo el mundo encanta: el olor a bebé.
Retenemos el olor de los bebés con un cariño especial. Es un aroma muy característico, que desprenden los bebés desde el momento en que nacen, y que según van creciendo, se va perdiendo. Sea lo que sea que inspiren, lo cierto es que gusta muchísimo, especialmente a las mamás.
¿Existe alguna explicación para el aroma a bebé?
Existen varias teorías que sostienen que efectivamente. Algunos expertos insisten en que es una técnica de supervivencia. Es decir, el olor a bebé resulta tan agradable que estimula tu deseo para alimentarlo y cuidarlo, de estar cerca de él, de sostenerlo en brazos.
Otros expertos, basados en algunos experimentos muy interesantes, afirman que el aroma a bebé genera respuestas en determinadas áreas del cerebro, aquellas que consiguen que elabores las hormonas relacionadas con la obtención de placer, sobre todo en las mamás.
Los científicos creen que este maravilloso y seductor aroma a bebé es una mezcla de varios elementos. Por una parte, el líquido amniótico en el que ha estado sumergido durante 9 meses. Por otro lado, la vérnix caseosa, que es la sustancia parecida al queso que recubre a los bebés al nacer.
Además, el bebé apenas suda cuando nace, ya que la regulación de su transpiración aún no está suficientemente madurada. Y las glándulas sudoríparas que emiten olores característicos, como las situadas en axilas o genitales, no están activas, por lo que no producen esos olores que se van emitiendo a medida que el niño va creciendo.
Ten en cuenta que tanto el aumento de transpiración con la actividad de tu pequeñín como la activación de esas glándulas con la pubertad provocan la desaparición de ese olor infantil para dar paso al del adulto. Y que está relacionado con la disminución del deseo de cuidarlos y alimentarlos.
Este aroma, fragante y embriagador que algunas mamás describen como olor a vainilla o a galletita, pero que resulta más agradable, dura un tiempo y va disminuyendo durante las primeras semanas.
Sin embargo, ese olor característico de los bebés recién nacidos se va perdiendo, pero aparecen otras fragancias que se convierten en símbolo de niñez, infancia y de miles de recuerdos para ti, que algún día posiblemente también lo será para tu hijo. El propio olor de los chiquitines, junto al esfuerzo por mantenerlos limpios utilizando productos como talcos, aceites o colonias solamente contribuye a conservar durante más tiempo ese inigualable olor a bebé. Y es que, ¿a quién no le recuerda a su infancia cuando inhala una colonia para bebés?
Cómo prolongar el olor infantil
El cuidado de los pequeñines de la casa se convierte en una prioridad para mamás y papás. Entre los productos más reclamados para los más peques, los que tienen que ver con su olor y su piel son algunos de los más comprados, junto a básicos como alimentación, pañales o toallitas.
En el caso de los aceites para bebés, es un tipo de producto de los más empleados para mantener hidratada la piel del bebé tras el baño. Además, permiten que puedas mantener deliciosas sesiones de masaje que refuercen el vínculo que tienes con tu bebé, e incluso ayudándole a aliviar los dolores de cólicos.
Por otra parte, necesitarás cremas para mantener cuidada e hidratada su delicada piel. Con su aplicación no solamente evitas rojeces e irritaciones, sino también que el aroma natural que desprende su cuerpecito resulte aún más intenso y embriagador. Y eso te indicará que su piel está sana, suave y tersa.
Y por supuesto, las colonias para bebé deben tener ciertas características, como estar libres de alcohol. Algunos aromas míticos, como la colonia Mustela, es símbolo de niñez e infancia para muchos papás y mamás, que quieren que la infancia de sus peques huela exactamente igual que las de ellos. También la encontraréis disponible al mejor precio en Más Pañales.
Y ya sabemos todos que los bebés huelen muy bien, tanto por el olor natural que emiten, como por los productos que utilizamos para ellos, como aceites y colonias. Y seguro que si has tenido un bebé recientemente (o si lo vas a tener, recuerda esto), te has descubierto aspirando una bocanada de ese aroma inigualable, tan placentero como embriagador, que desprende tu chiquitín o chiquitina. Para exclamar inmediatamente: ¡Qué bien huele!
Por ello, si quieres encontrar los mejores productos para tu bebé, tanto en colonias, cremitas u otros productos que utilizarás a diario, visita nuestra web Más Pañales. Nos encanta ayudarte a conservar y disfrutar del olor de los bebés todo el tiempo que sea posible, además de que mantengáis vuestra economía familiar teniendo lo mejor para vuestro bebé.