Como padres y madres, nos preguntamos cómo conseguir lo mejor en baberos, ya que no siempre lo más barato y bonito es lo mejor para los más pequeños. Una opción dentro de estos complementos son los baberos impermeables, fáciles y rápidos de limpiar.
A continuación te mostramos la mejor selección de baberos impermeables para que tu bebé coma cómodo y libre de manchas
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Los baberos es uno de esos complementos del bebé que son bastante flexibles en función de la edad y el tamaño del pequeño. Podemos encontrar baberos que son idóneos para recién nacidos y otros que pueden abarcar hasta los 3 a 4 años.
A ciertas edades del niño, donde están comenzando a comer solos, los baberos son útiles para evitar que se manchen y no tengamos que poner lavadoras a diario. No cabe duda que los baberos impermeables proporcionan una gran ventaja a los bebés, tanto en comodidad como en la facilidad de uso para los papás.
Por último, son buenos repelentes de babas y comida, por lo que evitan las irritaciones de la piel provocadas por la humedad y como protección contra afecciones respiratorias como la bronquitis, que es causada por la humedad constante en el pecho.
Los baberos impermeables que encontrarás en Más Pañales se destacan por contener divertidos diseños que harán de la comida del pequeño más divertida. Cuentan con un bolsillo que retiene las manchas y líquidos en caso de que el bebé tire algún alimento sobre sí mismo.
Además, están compuestos por plástico impermeable de calidad, suave al tacto, muy resistentes y sencillos de lavar. Y, por supuesto, son sencillos de poner y quitar mediante velcro y sin llegar a apretar el cuello del bebé.
Contiene diseños divertidos en vivos colores y con temática de la naturaleza y de animales que animarán al pequeño mientras está comiendo.
Para poder escoger los mejores baberos impermeables para bebé, hay que tener en cuenta una serie de factores para la hora de la comida sea algo cómodo y sencillo, tanto para el pequeño como para los padres.
En primer lugar, lo ideal es que se ajusten bien al tamaño del más pequeño, un modelo demasiado grande quedaría holgado y dificultará los movimientos del niño.
En segundo lugar, el material también hay que tenerlo en consideración, el vinilo o plástico ha de ser de calidad para evitar que las más manchas se “cuelen” hacia la ropita y piel del niño, así como contar con los certificados CE.
En último lugar, aparte del diseño, también es importante comprobar si disponen de un mecanismo para que se puedan poner y quitar con facilidad. Los métodos más sencillos de abrochado son el velcro y el corchete.
